La cuestión no es elegir entre uñas acrílicas o de gel. Ambos sistemas tienen sus ventajas e inconvenientes, pero muchas veces se desconocen.
Las principales diferencias entre ambos sistemas son las siguientes: el acabado de gel es más natural y flexible, no daña la uña y es algo más caro; mientras que el acrílico es más duradero y resistente, aunque más artificial. Por lo tanto, el acrílico es perfecto para uñas largas. En caso de rotura, el acrílico es más fácil de arreglar que el acabado de gel.
Uñas de acrílico
En su día, el sistema de uñas acrílicas sustituyó a las antiguas de porcelana, dado que no eran un producto seguro. Además, las uñas de porcelana estaban prohibidas, ya que no eran un producto apto, desde el punto de vista cosmético. Por el contrario, el acrílico sí está autorizado y es más flexible y moldeable que la porcelana. Igualmente, es un acabado resistente a cualquier impacto sin dañar la uña natural: “Fue el primer sistema inventado en uñas, surgido de mezclar un polvo (polímero) y un líquido (monómero). De la reacción química resulta una pasta moldeable que se aplica sobre la uña natural. Se puede extender una cobertura que sirve de protección o aplicarla sobre moldes o tips que generan una extensión y alargan las uñas", explica Berenice Espejo, manicurista oficial de la firma americana Entity en España.
Existe una gran variedad de polímeros de colores: desde colores más naturales a otros más extremos. Sobre todo, estos polímeros se recomiendan a mujeres que se muerden las uñas o trabajan mucho con las manos. Son moldeables, muy resistentes y adherentes. Igualmente, se adaptan bien a la uña natural: “Estos polímeros suelen durar de tres semanas a un mes. En el salón, su aplicación suele durar entre una y dos horas o incluso más, en función del diseño y acabado".
Uñas de gel
El sistema de uñas de gel se recomienda a mujeres con uñas muy flexibles. Es un producto de construcción similar al de las uñas acrílicas, pero en lugar de mezclar líquido y polvo, aquí ya está todo preparado. Se puede identificar porque parece una gomina, fabricado en diferentes texturas, consistencias y colores, garantizando un sellado perfecto de las uñas naturales: “Es un sistema trifásico, por lo que requiere de base, gel de construir y top coat. Se usa lámpara de luz UV/LED de 36 w para curar, polimerizar y endurecer el producto de forma segura. También es más ligero que el acrílico y su precio es más elevado, aunque dura lo mismo que el acrílico: entre 21-30 días. El acabado es totalmente natural, aportando mucho brillo a las uñas", añade Espejo.
¿Qué se puede hacer con las uñas de gel?
- Para hacer extensiones o alargamiento de uñas, es necesario usar geles de construcción, poner tips, moldes de papel mylar o moldes reutilizables. “La técnica no es difícil. Se aplica el gel al largo y forma deseada de las uñas, para meterlas después bajo una cabina o lámpara de luz LED o UV para su secado/polimerizado. Así cogen firmeza y dureza en segundos, pasos previos de todo un protocolo de aplicación”, cuenta la experta. Con las uñas de gel listas, Espejo aconseja aplicar aceite de cutículas a diario, con el fin de mantener la uña natural flexible y evitar un desprendimiento prematuro del gel.
- El ácido hialurónico proporciona un extra de hidratación a las uñas. Pero no solo eso: también las hace más flexibles a las fibras de queratina y a la piel de las cutículas. "Por supuesto, debemos evitar rascar o usarlas como herramienta, tenerlas largo tiempo bajo el agua caliente o simplemente en remojo continuo. Eso afecta sobre todo a su duración”, aconseja la experta.
- A la hora de quitarlas, Espejo aconseja rebajar con una lima 180/180, o bien con un torno hasta un 90% del producto, nivelando o eliminando restos de gel con lima 180/240 grit. Eso sí, ejerciendo un cuidado extremo para no dañar la uña natural.
Cómo prolongar la duración de las uñas de gel
Transcurridos 15 días, más o menos, es necesario acudir al salón para realiar un "rebalance" o un relleno completo a los 21-30 días: "Suelen preguntarnos por su duración respecto a las uñas acrílicas, aunque ambas duran lo mismo. El gel no es mejor que el acrílico o al revés. El producto se recomienda en función del tipo de uña natural y de las actividades o trabajo que realiza la clienta", comenta Espejo. En su opinión, no es necesario descansar de las uñas de gel. Es más importante acudir a salones expertos que sepan aplicar, limar y cuidar las uñas naturales para que estén siempre sanas.
Las uñas de gel protegen la uña natural de roturas y exposición a productos químicos, ya que es un producto flexible que también facilita firmeza: “Además, se pueden reconstruir si están mordidas o dañadas. El gel ayuda a recuperar más rápido la uña natural y su forma. Otra de sus ventajas es el hecho de que no produce olores ni vapores, conservando un ambiente saludable en el salón", puntualiza.