Publicado
15 jun. 2016
por tocado_admin
Entrevista a Salvador Gil, Gerente de Laurendor

Todo empezó en 1936. En Barcelona se vivía una época muy difícil, estaba a punto de empezar la Guerra Civil, pero mis abuelos, personas muy optimistas, decidieron fundar la empresa con ilusión. Mi abuela había vivido en París varios años, hacia poco que había vuelto y venía con muchas ideas. El mundo del maquillaje la había fascinado.
¿Cuál cree que es el producto estrella de la marca?
El color y, más concretamente, las bases de maquillaje han sido y son la columna vertebral de la marca. Hay un maquillaje que todavía se vende hoy en día y que ha batido records de venta en el mercado nacional: me refiero al Dermogético. En nuestra línea de maquillaje profesional Stage Line, el punto fuerte es el de las bases. Tenemos más de 8 productos distintos con formas cosméticas diferentes, en crema, fluidas y compactas, con más o menos poder cubriente, de mayor o menor durabilidad, resistentes al agua y al calor e, incluso, una de las bases tiene factor de protección solar 50. De todas ellas destacaría “Long Lasting Make Up”.
¿Podría explicarnos, de forma breve, cuál es el proceso que se lleva a cabo a la hora de sacar un producto nuevo al mercado? Desde que se ‘detecta la necesidad’ del lanzamiento hasta que se pone a la venta.
Nosotros sacamos dos modas cada año. En ellas es donde, generalmente, lanzamos nuevos productos. De todos modos, a lo largo del año también podemos hacer algún lanzamiento más.
En nuestro caso, hay dos factores muy importantes: el producto y el color. En primer lugar, el departamento de marketing detecta la necesidad. Hay que tener en cuenta que contamos con un equipo de maquilladoras que trabajan con nosotros y que están en contacto con el mundo de la moda, del cine y de la televisión. A menudo son ellas las que sugieren productos nuevos y marketing escoge el más oportuno en cada caso. Seguidamente se traslada la idea al laboratorio y este inicia un proceso de I+D hasta dar con una fórmula y una textura adecuadas. A continuación se procede a definir la gama de colores, teniendo en cuenta el mercado al que irá dirigido el producto.
Vendemos en más de 25 países, cada uno con sus tonalidades de piel, y creemos que ajustarse a ellas es básico si quieres vender allí.
Otro aspecto a tener en cuenta es el diseño del packaging, ya sea botella, tubo o polvera, además de la caja. El departamento de diseño y el de compras, junto con el departamento técnico, seleccionan los envases que más se ajustan a nuestras necesidades y, de esta forma, se lanza un nuevo producto.
Cada lanzamiento es un proyecto con su calendario, sus proveedores y sus ajustes. No es una labor sencilla, y el problema es que entre moda y moda sólo hay seis meses…
Laurendor es una empresa con más de 80 años en el mercado, ¿qué valores cree que han sido imprescindibles para llegar hasta aquí?
Durante estos 80 años, a nivel personal, los factores básicos para impulsar esta empresa han sido la ilusión, el amor al maquillaje y el optimismo. También se puede hablar de otras cuestiones como es el respeto a las personas y la idea de igualdad. Laurendor es una empresa predominantemente femenina donde los cargos de más responsabilidad se reparten entre hombres y mujeres, habiendo más mujeres en cargos de máxima responsabilidad que hombres. En cuanto a los productos, buscamos que sean seguros y de calidad. Disponemos de la ISO 9001 y fuimos, en 2014, una de las primeras empresas del sector en aplicar la ISO 22716.
En cuestión de pocos años han salido al mercado muchísimas marcas de cosmética ‘low cost’. ¿Cree que el sector debería estar más regulado? ¿El consumidor da suficiente importancia a la calidad de los cosméticos?
Sí, hay muchas marcas, pero eso no se puede evitar. Lo importante es que todos se ajusten a la regulación sanitaria vigente y se cumplan las normativas fiscal y laboral. No creo que haga falta más regulación. Estamos en un mercado libre. Lo importante es que todo el mundo juegue con las mismas reglas.
¿Podría desvelarnos algún lanzamiento en el que estén trabajando actualmente?
Estamos ampliando nuestra línea de máscaras. El mercado se ha vuelto más exigente en este campo. La consumidora es más experta, sabe mejor lo que necesita y, además, nosotros nos dirigimos a un mercado en el que la profesional del maquillaje tiene gran protagonismo. Esto nos obliga más que a otros a tratar de satisfacer sus necesidades.